ARROYO: Savu; Felipe Belmonte, Santi Polo, Oca, Dani Hedrera, Gante, Joshua, Armero (Pina, min. 67), Carlos, Pino (Vallecillo, min. 85), Antonio (Carlitos, min. 75).

SANVICENTEÑO: Kouba; Guru (Rubén, min. 70), Carlos, Javito, César, Juanpe, Juanra (Aven, min. 77), Bele, Nono, Soroa (Uva, min. 65), Alex.

GOL: 1-0 (min. 6): Dani Hedrera.

ARBITRO: Olivera Vázquez. Amonestó con tarjeta amarilla a los jugadores visitantes Carlos, César, Nono y Alex.

INCIDENCIAS: Decimosexta jornada del grupo XIV de Tercera División.

Se impuso el Arroyo con contundencia (no tanto en el marcador, pero sí en el juego, 1-0), a un Sanvicenteño que solo pudo defenderse del acoso de un equipo crecido en las últimas fechas. Pronto avisaron los de Adolfo Muñoz. Fue Oca el que pudo hacer gol apenas llegado el minuto 4 de partido, pero su cabezazo salió lamiendo el palo.

En el conjunto blanquiazul partió arriba de inicio Antonio, titular ante la retirada en el calentamiento de un lesionado Aday. Cuajó un buen partido Antonio que, poco a poco, vuelve a ser ese delantero que deslumbraba hasta caer lesionado al poco de iniciarse el curso.

En el minuto 6 llegó el primer tanto (y único) local. Fue Hedrera el que conectaba una buena bolea en el segundo palo para batir entre las piernas a Kouba. Si hubo un protagonista en el primer acto, fue Felipe Belmonte, siempre profundo. Al lateral derecho jamás se le pudo reprochar falta de garra o empuje, pero ayer, además, estuvo particularmente preciso en todas las acciones ofensivas que protagonizó. Los instantes finales del primer tiempo fueron un acoso arroyano, solo aliviado por las intervenciones del portero Kouba, el mejor de los suyos.

La segunda mitad siguió en la misma línea. El Arroyo mandando y el Sanvi agarrado al partido gracias, sobre todo, a su arquero. En el Arroyo cada uno de los componentes del equipo pudo haber hecho el gol de la tranquilidad, la mayoría asistidos por Pino, el mejor de los locales.

Belmonte cedió el testigo a Santi Polo, que incluso pudo hacer gol, pero su golpeo con pierna izquierda acabó en el lateral de la red. No pasó apuros el Arroyo al final, pero un partido que debía haber sido para ahorrar energías acabó por enquistarse debido a la falta de puntería en los metros finales.