Negrín Quintana, uno de los árbitros asistentes del partido Cádiz-Algeciras, que se disputó ayer en el estadio Ramón de Carranza, tuvo que ser ingresado en un hospital de la capital gaditana tras un desvanecimiento.
El asistente, que ocupaba la banda de la zona de preferencia, cayó al suelo a falta de 58 segundos para que concluyera el encuentro, según el colegiado, el canario Raúl Alfonso Suárez, y en principio sin que fuera alcanzado por objeto alguno, ya que no se le apreció traumatismo alguno.
Negrín Quintana fue auxiliado en el terreno de juego por Nacho Bocardo, preparador físico del Cádiz, que le sacó la lengua que se había tragado parcialmente el asistente al quedar inconsciente, y por Martínez Villar, médico del club cadista.
Seguidamente el asistente fue trasladado en una ambulancia al hospital Puerta del Mar, de Cádiz, donde quedó ingresado para su observación, y a donde también se dirigió el arbitro, Raúl Alfonso Suárez para conocer más detalles de la situación clínica y redactar el acta.
El marcador señalaba un empate a uno.
