Dos victorias en otros tantos partidos fue el balance. La jornada de anoche en la Copa de la UEFA fue excelente para los dos equipos españoles, Atlético y Villarreal, ante los griegos Panathinaikos y AEK, respectivamente.

Un agónico triunfo, culminado por el portugués Simao Sabrosa con un golazo de falta en el tiempo de descuento (2-1), impulsó al Atlético de Madrid a la primera posición del grupo B de la Copa de la UEFA ante un buen Panathinaikos, al que su orden defensivo le permitió controlar casi siempre el encuentro.

El dominio de la situación de los visitantes llegó hasta prácticamente el último cuarto de hora, al que se llegó con un 0-1 a favor del conjunto griego, pero los tantos de Luis García y el extremo luso rescataron al equipo español, ayer muy irregular durante los noventa minutos, pero ganador inesperado del duelo.

El liderato del grupo B estaba en juego en el Vicente Calderón, con apenas 12.000 espectadores en las gradas y con un Atlético de Madrid tan frío como el ambiente en el arranque del duelo, sobre todo por el orden defensivo de su contrincante, que demostró en el inicio por qué sólo había encajado un gol en cinco partidos de UEFA.

Mientras tanto, el Villarreal se impuso al AEK en Atenas (1-2) y logró acceder los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA como primer clasificado de su grupo tras un partido dominado por el equipo español ante un rival que sólo apretó en momentos puntuales y, principalmente, en el tramo final del choque, en el que el gol de Tomasson determinó el triunfo español.