La derrota del Real Madrid en Riazor (3-1) ha escocido enormemente en el Santiago Bernabéu, donde la primera medida ha sido realizar una seria autocrítica.

Alfredo Di Stéfano, presidente de honor del club blanco, afirmó que "hay que ponerse a trabajar, meter la pierna y jugarse el tipo. Hay tiempo para corregirlo, las semanas son para trabajarlas y pienso que se está entrenando bien. Pienso que hay tiempo para interpretar bien esta parodia. Capacidad tienen para reaccionar y creo que lo harán".

REFLEXION Por su parte, Sergio Ramos declaró que el equipo debe reaccionar. "Hemos sacado conclusiones para ver los fallos cometidos, pero no ha habido bronca. Hay que reflexionar por la imagen que dio el equipo. Tenemos una mala racha pero debemos pensar en el próximo encuentro en el que tenemos que conseguir la victoria", apuntó.

El defensa andaluz tiene clara la receta para salir adelante. "El fallo fue del grupo y nos debemos exigir un poco más. No faltaron ganas porque salimos al cien por cien, pero hay que exigirse más para que salgamos adelante. El equipo en general no estuvo bien, pero debemos hacer grupo. Viene bien que no todo sean halagos, porque tenemos que reaccionar. Con todo lo que hemos escuchado, espero que el equipo salga con otra mentalidad", afirmó.

El equipo volvió a encajar dos goles a balón parado. "Es cierto que nos volvieron a crear problemas a balón parado y debemos hacer hincapié en ese tipo de jugadas. Respecto a mi posición, estoy abierto a todo", apuntó.

Sergio Ramos ya mira hacia el futuro, que pasa por el partido contra el eterno rival de un sevillista. "Siempre será un partido diferente, contra el Betis, y también para el equipo, por los momentos que está viviendo. El equipo saldrá diferente tras dos derrotas. Voy con una motivación extra. Me gusta que me piten y se metan conmigo". Finalmente, destacó la importancia de Ronaldo en el equipo, lesionado hace dos semanas. "Es un jugador clave, porque de dos balones que toca, mete uno. Nos hace mucha falta", remarcó.