El Badajoz sigue disfrutando de muchas ocasiones, como se encarga de recordar constantemente su entrenador, Juan Marrero, aunque le está constando materializarlas. Sobre todo lejos del Nuevo Vivero. En las dos salidas del 2018, el conjunto blanquinegro se ha vuelto de vacío, primero ante el Linense y después contra el Recreativo, donde gozó de muchas oportunidades en la primera parte «que hemos vuelto a desaprovechar». No le sucede lo mismo en su campo, ante su público, donde ha marcado siete tantos en sus dos últimos encuentros. A ese dato se agarra el conjunto pacense, que ya piensa en su compromiso del domingo ante El Ejido, un equipo que suma tres puntos más y con el que empataron en la primera vuelta (1-1). Un triunfo sería vital en este caso para los de Marrero, ya que les permitiría igualar con los almerienses y superarlos con el goal average.