Los partidos del destierro del Real Betis podrían ser en el estadio Nuevo Vivero de Badajoz. Ese es el objetivo de la asociación Ambición Blanquinegra, que tras la sanción recibida al equipo verdiblanco por el botellazo a Juande Ramos en el Betis-Sevilla de la Copa del Rey, ha ofrecido el recinto en el que juega el Club Deportivo Badajoz a la entidad sevillista que preside Pepe León.

La propuesta se realizó por fax en la mañana de ayer.

Según una nota de prensa, el ofrecimiento se hace de manera "prácticamente desinteresada", solo cubriendo gastos para paliar en cierta medida las incomodidades que sufrirá la afición bética durante tres encuentros. "Sería además un honor para la ciudad de Badajoz y para los miembros de la Asociación Ambición Blanquinegra, gestores del club centenario extremeño (el Badajoz fue fundado en el 1905) recibir en a otro equipo centenario como el Betis", expone el escrito.

Según Ambición Blanquinegra, el Estadio Nuevo Vivero cumple todas las normativas vigentes FIFA y tiene instalaciones propias de un club profesional, no en vano desde su inauguración en 1998 la selección española absoluta ya ha disputado dos partidos en Badajoz.

Investigaciones Mientras tanto, la Policía Nacional sigue con las investigaciones para hallar al autor del botellazo, informa Europa Press. Está interrogando y hablando con aficionados ubicados en la zona del campo del Betis desde donde presumiblemente se lanzó el objeto, por si pudieran aportar algún dato, y al mismo tiempo está recabando vídeos de los hechos entre las televisiones locales que disponen de grabaciones propias.

Las fuentes consultas reconocieron que por el momento no hay ningún resultado de las investigaciones, iniciadas inmediatamente a raíz de los altercados.