Buenas noticias en el Badajoz, que recupera a muchos de sus futbolistas tocados para el derbi de mañana ante el Mérida en el estadio Nuevo Vivero. José Ángel, Juanma y Gabri Izquier estarán a disposición del entrenador, Juan Marrero, que sin embargo tendrá que recomponer su defensa para recibir al conjunto romano por las bajas de Fran Morante y Rafa Navarro. «Es un reto mantener la solidez defensiva», reconoció ayer el preparador, que también reconoció que les hará falta más que fortaleza atrás para ganar partidos. Tres partidos sin marcar acumula ya el conjunto blanquinegro, un déficit que el que el técnico cree urgente cambiar. «Y podemos», señaló ayer. Explicó también que lo importante será «mantener la competitividad durante los 90 minutos, pase lo que pase en el partido». En el estadio se espera una gran entrada y tanto el técnico como los jugadores pacenses saben que esa será un ‘arma’ a su favor y que tendrán que saber utilizarla para sumar tres puntos vitales.