Aparte del berenjenal que supone manejar a 1.300 deportistas y satisfacer a sus 3.000 acompañantes, la organización del Campeonato de España de balonmano para selecciones autonómicas infantil y cadete que se disputa en Cáceres se encontró ayer con un problema adicional inesperado. Por la mañana, las pistas de los pabellones de El Vivero y Casar de Cáceres estaban muy resbaladizas debido a la condensación que producía el clima, lo que impidió que se disputasen los partidos programados.

Sin embargo, rápidamente se encontraron soluciones que apenas perturbaron el calendario y los encuentros pasaron a dos recintos que dieron todas las facilidades, los del Colegio San Antonio y la vecina localidad de Malpartida de Cáceres. Hoy esta anormalidad se mantendrá, pero se espera que sin consecuencias negativas.

Doble derrota

En lo deportivo, Extremadura sigue lejos de cuajar un buen papel. Ayer, las dos selecciones que ponía en liza perdieron.

En cadete femenino, la derrota fue muy clara ante Navarra (14-34), lo que lleva a luchar por las posiciones 9 a 12 a partir de hoy. Será ante Castilla y León a las 10.30 horas en el Pabellón Serrano Macayo.

Hoy habrá otros dos encuentros de los extremeños: el infantil femenino se mide a Murcia en la Ciudad Deportiva a las 16.00 horas (puestos 15 al 17) y el infantil masculino lo hará ante el Asturias en el San Antonio (puestos 13 a 18).

Mientras, los cadetes masculinos estuvieron cerca de sumar su primer triunfo, pero no acertaron en el final apretado frente a Baleares (34-36) y lucharán por evitar el último puesto mañana ante Melilla.