PORTUGAL 0: Ricardo (Quim, min.77); Miguel, Fernando Meira (Andrade, min.46), Fernando Couto, Nuno Valente (Rui Jorge, min.46); Costinha, Maniche (Frechaut, min.69); Sergio Conceicao (Boa Morte, min.46), Rui Costa (Deco, min.62), Figo; y Pauleta.

ESPAÑA 3: Iker Casillas (Cañizares, min. 66); Michel Salgado, Marchena, Juanito, Puyol (Romero, min.46); Etxeberría, Xabi Alonso, Baraja (Xavi, min.46), Vicente (Reyes, min. 46); Raúl (Tristán, min. 46) y Fernando Torres (Valerón, min. 44).

GOLES: 0-1. Min. 12. Etxeberría. 0-2. Min. 64. Joaquín. 0-3. Min. 76. Tristán.

ARBITRO: Marian Mircea Salomir (Rumania). Amonestó a Sergio Conceicao y Couto.

España recuperó su autoestima en un buen partido que sirvió de impulso anímico a un grupo que andaba triste y que dejó para el recuerdo el debut de Fernando Torres y José Antonio Reyes en el equipo absoluto. Torres, además, sufrió el lado amargo del fútbol. Vio cómo un tipo veterano --Fernando Couto-- le dejaba fuera de combate a los 43 minutos con una entrada absurda y a destiempo en zona de nadie, impropia de un defensa experto y de largo recorrido ya en el panorama internacional.

España firmó una victoria notable, con una participación decisiva en el segundo tiempo de la escuela sevillana --Joaquín, Reyes y Tristán--, que dieron todo un curso de arte.

Uno de los argumentos de la noche era ver cómo funcionaba el tándem Raúl-Torres. El invento pasó la prueba. Raúl jugó cómodo de segunda punta, el sitio que le gusta, y por fin abandonó el puesto de nueve que desempeña a veces en la selección para cohabitar con Valerón. Sáez acertó con la pareja de arriba. Y también vio como Puyol pasó el examen de ser el nuevo lateral izquierdo, un sitio que está como un solar desde que salió Sergi del equipo nacional.

PESIMO PORTUGAL

Portugal fue un desastre en el primer tiempo. Repleto de futbolistas buenos, famosos, sólo reaccionó con timidez en el segundo tramo. Hasta el minuto 57 cuando Andrade mandó un cabezazo que sacó Iker con solvencia, la selección de Scolari estuvo a merced de España. Y es que el equipo de Sáez le dio un baño.

Y es que Xabi Alonso tapó la creación de Rui Costa y tanto Figo como Conceicao les costaba entrar por los costados. Sáez cambió el mapa tras el descanso. Hizo cuatro cambios. No era necesario correr más riesgos. Con la lesión de Torres ya era suficiente. Así que los pesos pesados del equipo se fueron a la ducha.

España obtuvo un triunfo balsámico, que sube su moral ante el compromiso del miércoles en Elche contra Ucrania. Grecia no perdona, pero el asunto ahora es ir progresando en la confección de un equipo nuevo que viene regenerando sin ruido Sáez desde hace un año.

MAESTRIA SEVILLANA

España siempre tuvo el balón y ya mereció irse al descanso con un marcador holgado. El gol de Etxeberría, un palo de Baraja tras un libre directo, las llegadas de Vicente por el costado izquierdo silenciaron el moderno estadio de Guimaraes, que en el segundo tiempo vio también cómo España ampliaba la cuenta con un golazo de Joaquín. Y de regalo también presenció un magnífico remate de Tristán a los 70 minutos que sacó Ricardo con una mano increible.

España vio cómo ganar a Portugal le da una inyección de moral a una tropa que exhibía muchas dudas. Otro de los debutantes, Reyes, sacó detalles del talento que atesora. Le escondió el balón a Miguel y a Andrare cuando se echaba a la derecha y dio un plus de reconocimiento al fútbol sevillano. En la capital andaluza no pueden ver juntos a Joaquín y a Reyes, pero en la selección sí.

La unión de Valerón-Joaquín-Reyes-Tristán en la última media hora fue todo un espectáculo. Tristán firmó un soberbio tanto y el público coreó con olés la demostración.