El Barcelona se mide hoy al Deportivo con la sensación de que una victoria no sólo le puede acercar un poco más al título, sino que podría dejar sentenciado el campeonato, al ser uno de los últimos obstáculos que debe sortear en las últimas diez jornadas.

A pesar de vivirse con intensidad en la entidad catalana los instantes finales del campeonato, en el conjunto barcelonista se también respira una cierta preocupación por el exceso de euforia que embriaga al club y a los aficionados. Rijkaard podrá contar con todos sus efectivos, después de recuperar a Deco, Ronaldinho y Márquez, aquejados por molestias físicas en los últimos días.

Para hoy también están previstos los encuentros Betis-Albacete (18.00) y Espanyol (20.00 horas).