Una gran segunda parte del FC Barcelona-CIFEC, con un extraordinario David Barrufet, como cierre de una sólida defensa y con Laszlo Nagy imparable en ataque, ha dado hoy una importante victoria por 24-26 al equipo catalán en la pista del Magdeburgo alemán que le coloca con un pie en los cuartos de final de la Liga de Campeones. Fue también un triunfo histórico para los barcelonistas que, hasta ayer, nunca habían logrado vencer en una cancha germana, ni en Liga de Campeones, ni en Recopa, ni en la Copa EHF.

Tras un primer tiempo de claro color local (al descanso 15 a 11) las cosas tampoco comenzaron bien para los de Xesco Espar en el segundo tiempo. Bielecki y Tkaczyk daban la máxima ventaja del partido para el Magdeburgo (17-12, m.33). Espar ordenó a su defensa cerrarse más ante las penetraciones de la primera línea germana por el centro y jugar con fluidez en ataque.

Un parcial de 0-4 (17-16, m.38) frenó a los locales y acciones rápidas de Iker Romero, jugando con el dedo pulgar de su mano derecha totalmente magullado, y un gran tanto de Laszlo Nagy dieron la vuelta (18-19, m.41).

Tkaczyk transformó su quinto penalti (23-22, m.50), pero el Barcelona controlaba totalmente el encuentro y tres tantos casi consecutivos de Nagy y otro de Juanín, que realizó un desgaste increíble cambiando de banda una y otra vez, dejaron el marcador en 23-26, que fue clave.