BARCELONA: Jorquera, Puyol, Márquez (m. 46, Sylvinho), Oleguer, Van Bronckhorst (m. 78, Van Bommel), Edmilson, Deco, Van Bommel, Giuly, Messi (m. 66, Larsson) y Ronaldinho.

ZARAGOZA: César Sánchez, Alvaro, Gabi Milito, Cuartero (m. 68, Toledo), Ponzio, Celades (m. 82, Movilla), Generelo, Cani, Ewerthon, Oscar González y Diego Milito.

GOLES: 1-0: m. 41, Messi; 1-1: m. 65, Oscar. 2-1: min. 90, Larsson.

ARBITRO: Rodríguez Santiago (Castilla y León). Amonestó a Edmilson, Alvaro, Gabi Milito, Generelo, Zapater y Celades. Expulsó a Ronaldinho en el minuto 37.

El Barcelona fue eliminado en los cuartos de final de la Copa del Rey y se despide así del primer título de la temporada. Y lo hizo con polémica, ya que el Bar§a con diez futbolistas desde el minuto 37 a causa de la rigurosa tarjeta roja de Ronaldinho, expulsado por una presunta entrada sin balón al zaragocista Cani. Antes, el conjunto de Frank Rijkaard se mostró muy superior al equipo maño, que no tuvo problemas en ceder más de tres cuartas partes del campo a los locales y esperar a que la providencia le sonriera o César Sánchez tuviera un buen día. El tanto de Lionel Messi al filo del descanso dio esperanza en el Camp Nou, pero en el segundo tiempo Oscar sentenció la eliminatoria.

Como casi siempre que sus equipos se enfrentan al Barça, la táctica le funcionó a Víctor Muñoz, al menos hasta el filo del descanso. Una por una, cada oportunidad azulgrana se alejaba de la meta del Zaragoza por centímetros. Así sucedió con el tiro cruzado de Messi, el cabezazo de Márquez que milagrosamente sacó Gabi Milito debajo de palos o el saque de falta directa sacado por Ronaldinho.

MOMENTO CLAVE Sin embargo, si algo caracteriza al Zaragoza es la capacidad de trenzar oportunidades de gol a base de velocidad con apenas tres pases. Ocasiones, si cabe, más claras que las del Barça. En sólo cuatro minutos, del 28 al 32, el cuadro visitante pudo adelantarse en dos ocasiones. Un excepcional Jorquera fue el encargado de frenar los remates a bocajarro de Cani y Ewerthon.

Entonces llegó la expulsión de Ronaldinho, en el minuto 37. Donde nadie vio más que un lance del juego, Rodríguez Santiago apreció una entrada a la altura de las rodillas de Cani que mereció la roja directa. Cuando menos, rigurosa, y protestadísima por el público local.

Sin embargo, lejos de condicionar el encuentro, el Barça encontró en su inferioridad numérica un estímulo para lanzarse al ataque. Un cabezazo de Messi a centro de Giuly, fuera del alcance del meta extremeño César, dejó claro que con un 1-0 la eliminatoria no se decidiría hasta la segunda mitad.

Los de Frank Rijkaard salieron con enorme brío tras el descanso. En el minuto 52, Iniesta recogió un pase de Edmilson y chutó al poste. La fortuna se le terminó de evaporar al campeón liguero cuando Oscar culminó una gran jugada dentro del área (min. 67) y obligaba al Barcelona a marcar dos tantos. Sólo logró uno, y demasiado tarde, por mediación de Larsson. Luego ya no hubo tiempo para más.