El Cáceres quiere ser pata negra en la LEB Oro. Su propio entrenador, Ñete Bohigas, lo escenificó ayer fotografiándose con un jamón ibérico en el marco de la presentación de un acuerdo promocional previo al debut en casa hoy ante el Peñas Huesca (21.00 horas, Multiusos). Tras el triunfo en el primer partido liguero en Castellón, llega el nuevo reto ante otra plaza histórica del baloncesto español.

"Sabemos dónde estamos. Estamos contentos, pero hemos de trabajar con humildad. En esta categoría, ganar siempre es muy complicado". Bohigas respondía así al preguntársele sobre sus objetivos, que pueden ser ambiciosos, pero siempre apelando a la cautela. El partido de hoy, con un intermedio en el que habrá concurso de lanzamientos patrocinado por la firma Esencia de Extremadura, reúne el atractivo de ver en competición oficial a un equipo que ya ilusiona, pese al nivel de exigencia de su técnico, que informó que durante el inicio de la semana había trabajado especialmente en la defensa. En su opinión, fue ésta la faceta más débil de sus jugadores en la vuelta a la segunda categoría del basket español.

"Es un partido atractivo ante un histórico que, en una ciudad como la nuestra, se respira baloncesto, que es algo más que un deporte". En lo estrictamente competitivo, Bohigas subrayó que el Huesca, de la mano de Quim Costa, es un bloque "duro, agresivo y con jóvenes con talento que pronto seguro que vemos en categorías superiores". Sin embargo, como le ocurre al propio Cáceres, no estará, a priori, entre los favoritos, como Ourense, Burgos, Melilla o Palencia, expresó el entrenador.

APOYO DEL PUBLICO El preparador verdinegro espera que la grada responda "y sumemos más". "Vamos a ver mejor baloncesto", advirtió, que la pasada temporada. Por ello, deseó que en el Multiusos se produzca una simbiosis importante entre público y jugadores.

La gran adaptación del lituano Slezas, la consolidación de los jugadores claves en el ascenso y la de los fichajes nacionales como Sergio Pérez o Alvaro Frutos fueron argumentos esgrimidos ayer por Bohigas. "Una de las claves este año debe ser seguir con la complicidad del año pasado y sumar a otros, aunque todos debemos saber que va a ser más dificil ganar tranquilos".

Bohigas espera que jugar en casa no sea algo que se vuelva en su contra, que los jugadores no se sientan presionados. "Si somos capaces de jugar tranquilos y centrados podemos hacer un buen baloncesto en casa. Esperemos que no sea una presión añadida y esté el público muy cerca del equipo, como el año pasado".

Ganar fuera es, precisamente, la asignatura pendiente del rival de hoy. "Con un equipo joven, con falta de experiencia, a veces es complicado tener esa serenidad para cuando el contrario aprieta no dejarte atrapar", analiza el técnico Quim Costa. "Si queremos ganar fuera tendremos que tener un plus".