Entre los entrenadores, es conocida la obsesión de Carlos Bilardo por combatir el mal fario, algo que pretendía hacer enterrando ajos detrás de la portería local y alrededor del banquillo. Respecto a la forma de vestir, son muy supersticiosos Fabio Capello, que aborrece las camisas blancas y los calcetines cortos, y Radomir Antic, que en 1997 repitió la corbata a bandas azules y verdes con la que ganó el doblete (Liga y Copa) con el Atlético de Madrid el año anterior.

Curiosa es la expedición de los países africanos que compiten en los grandes torneos, que incluían a un brujo hasta que su Confederación los prohibió en 2002, "para no mostrar una imagen tercermundista durante el torneo", aunque Nigeria, Camerún y Suráfrica se saltaron la norma en el Mundial de Corea.

También un profeta tuvo una intervención estelar en el Mundial de Estados Unidos 1994, al vaticinar al colombiano Freddy Rincón los resultados exactos del torneo, por lo que el futbolista estuvo desmotivado y torpe.