Dos horas, 22 minutos y 40 segundos es la mejor marca de un maratoniano extremeño. La ostenta el villanovense Juan Francisco Sánchez, que la consiguió en 1999 en el maratón de Sevilla, la misma prueba en la que el domingo debutará Pablo Villalobos con el objetivo de rebajar ese tiempo hasta los 2h15, marca mínima para asistir al Campeonato de Europa de Barcelona.

En Extremadura no hay demasiada tradición maratoniana. Hasta mediados de los 80 no aparecen los primeros fondistas que dan el salto al maratón. El primero fue Elías Chavete, que nunca rompió la barrera de las 2h30. Le siguieron Carmelo Durán, de Fregenal de la Sierra, Carlos Alcario, de Badajoz, o los emeritenses Miguel Angel Contador y Diego Carrasco Lozano, que empezaron a mejorar las marcas. El más aventajado de esta primera generación de maratonianos extremeños fue Miguel Donoso, que paró el crono en 2h26.46.

Hasta finales de los 90 no volvieron a aparecer extremeños en el maratón. De esta época son Juan Francisco Sánchez, José Miguel Ruiz Rodríguez y Juan Francisco Cano, a los que ahora seguirán Pablo Villalobos y el moralo Miguel Angel Gamonal, que correrá en abril su primer maratón.

En cuanto a las chicas, destaca Tina María Ramos, una histórica del maratón español que ha ganado cuatro veces es del Sevilla. También destaca Ana Belén Fernández.