El Plasencia se estrenó ayer ante su afición con su primera victoria como local esta temporada. El gran ambiente desde la grada contribuyó sin duda al éxito local. Los jerteños ampliaron la crisis del CAI Zaragoza, uno de los grandes de la categoría y un equipo con el que se vive una especial rivalidad. Aunque tan sólo Palacios, en el Plasencia, y Ciorciari, Lescano y Ferrer fueron testigos de los enfrentamientos de la campaña anterior. Con esta victoria (76-70), los locales se olvidan prácticamente ya de las dudas generadas en el comienzo de la temporada.

En el apartado particular, Carles Canals, que salió desde el banquillo, fue el máximo anotador ayer. Fue letal desde el 6.25 y se encargó de conducir los mejores momentos de su equipo.

El partido arrancó de manera sorprendente, pues dos triples de Couthbert Victor marcaron la primera ventaja placentina. Con estas tempraneras acciones terminó de encandilar a la afición.

El intercambio de canastas evitaba que ninguno de los dos adquiriera ventajas amplias. El primer acto terminaría así con un apurado 20-19.

Los siguientes diez minutos fueron decisivos. Comenzó con un CAI lanzado y que logró la máxima diferencia visitante (20-25, min. 12). John Brown llevaba ya 17 puntos y él solo se encargaba de martillear el aro del Plasencia.

Hasta el minuto 16, el electrónico mantenía la igualdad (30-30). En este momento llegaría uno de los verdaderos puntos de inflexión del choque. Tras un tiempo muerto de Oscar Quintana, los jerteños abrieron brecha. Un parcial de 10-0, con Canals como líder y el visitante Brown en el banco, hizo que el encuentro alcanzase el ecuador con 42-32.

EN EL TERCER ACTO El despiste del CAI se mantuvo en la reanudación, cometiendo el explacentino Jesús Cilla su cuarta falta personal en el minuto 21. Los de Dani García supieron aprovechar la circunstancia y tras varios robos de balón colocaron la victoria muy a su alcance (59-41, min. 28). El duelo estaba muy de cara para los locales y así se entró en el último periodo (62-49).

La renta se mantendría por encima de los diez puntos en todo momento, hasta que en los últimos tres minutos y medio, el cuadro jerteño se relajó y dio pie al CAI para que luchara por el partido. Saltaron las alarmas en el Plasencia, pero mantuvo la calma para cantar la primera victoria en casa.