Seguir soñando o sufrir extraordinariamente. Todo o nada. El Cacereño visita al Sporting B (Escuela Municipal de Mareo, 12.00 horas) sin apenas margen de error, en un partido que puede ser definitivo para los intereses del conjunto verde, que contará en Gijón con el apoyo de cerca de 200 incondicionales que han viajado durante toda la madrugada para empujar a su equipo en el vital encuentro.

Los dos equipos ansían con ahínco los tres puntos que hoy se ponen en juego. Para los asturianos puede suponer prácticamente la salvación matemática, mientras que para los cacereños será un gran paso, aunque no definitivo, hacia la permanencia. "Los jugadores van a darlo todo", recalcó Angel Marcos durante su habitual alocución ante la prensa, "el equipo está muy mentalizado para ganar", dijo.

En contra del Cacereño están las estadísticas, pues esta temporada solo ha sido capaz de ganar dos partidos lejos de su estadio (Tenerife B, rival del próximo domingo en el Príncipe Felipe, y Villanovense), aunque esto no preocupa a su entrenador. "Las estadísticas están para romperlas", aseguró Marcos con contundencia. A su favor está el plus que aporta la afición, que durante toda la semana se ha movilizado para acompañar al equipo en la Escuela Municipal de Mareo. "Es una suerte que no vayamos a estar solos en Gijón", señaló el entrenador verde, que hizo hincapié en la buena comunión que hay entre afición y equipo.

El Cacereño, que está desde el viernes en Gijón, no podrá contar con Cazorla y Dieguito, sancionados por acumulación de amarillas; ni con Gonzalo y Yannick Agro, que no viajaron por decisión técnica. Tampoco estará Sergio, que no ha podido entrenar al cien por cien durante la semana por los problemas en su cadera que arrastra desde el partido contra el Conquense.

A la defensa verde volverá Tito, ausente el último partido por sanción, y Palero sustituirá a Cazorla. Tomás y Julio completarán la zaga cacereña. En el centro, además de Lolo, Marcos baraja los nombres de Chiqui e Ito, mientras que las bandas serán para Rocha y Estévez. La punta de ataque será para Rubén Jurado y Rai, que se ha reencontrado con el gol justo cuando más lo necesita su equipo. Ellos serán los encargados de mantener con vida el sueño de toda la afición verde.