Pese a que el resultado del Príncipe Felipe no es bueno, el Cacereño confía en pasar la eliminatoria que se dirime a partir de las 17.00 en Mieres. Técnico y jugadores se apoyan en la ambición, en una fe inquebrantable y en unos números durante la Liga regular que apoyan la presentación de credenciales para jugar la segunda y definitiva eliminatoria de la fase de ascenso. De los 19 encuentros disputados fuera de casa, los de José Manuel solo fueron derrotados en tres, para un total de ocho empates y ocho victorias. Tomando como punto de partida de las opciones los precedentes ligueros fuera de su estadio, el Cacereño logró un resultado que le permitiría dejar hoy en la cuneta al Caudal en ¡nueve ocasiones! Y en dos ocasiones más, se produjo un resultado (1-1) que provocaría que asturianos y extremeños se jugaran el todo por el todo en la tanda de penaltis.

El Cacereño sale con la premisa de marcar en el estadio Hermanos Antuña. En siete ocasiones quedó sin anotar esta campaña fuera la escuadra verde; sólo en una ocasión horadó la meta rival el Cacereño fuera y perdió (Badajoz, 3-Cacereño, 1), lo que hace presumir que si el once extremeño logra marcar, estadísticamente tiene muchas opciones de lograr su objetivo.

Para ello habrán de superar el ambiente de un campo que presumiblemente estará lleno y que, a instancias del entrenador local, se regará, pese a que el viernes llovió abundamente en Mieres, con el objetivo de que la pelota ruede muy rápida. Los locales aseguran que saldrán a por el partido desde el inicio y piensan ya en su próximo rival. Ambas circunstancias pueden favorecer al Cacereño.