El Cacereño tratará de hacer hoy borrón y cuenta nueva y lograr la primera victoria de esta temporada ante un Oviedo (Carlos Tartiere, 19.00 horas) que tras destituir también a su entrenador esta semana continúa buscando al nuevo inquilino de su banquillo, una situación de la que puede aprovecharse el conjunto verde, colista del grupo II de Segunda B con dos puntos.
El mal arranque liguero ya le ha costado al Cacereño la destitución de Angel Alcázar para tratar de enderezar el rumbo de un equipo que no puede permitirse muchos más errores si no quiere complicarse en exceso la permanencia, que a priori es el objetivo que se ha marcado el club.
MAS ATAQUE El nuevo ´director´ del banquillo, Angel Marcos, promete un nuevo estilo, en el que los delanteros van a tener más opciones para paliar la falta de gol, uno de los males de este Cacereño. Marcos apostará hoy por dos hombres en ataque, que en principio deben ser Valtierra y Rai, que será el más adelantado, aunque también viajaron ayer Rubén Jurado y Sergio.
Para el centro del campo ha vuelto a la convocatoria Javi Ramos, que sorprendentemente no estuvo ni tan siquiera en el banquillo en el último partido, el del pasado domingo contra el Villanovense.
El equipo verde debe aprovechar hoy el momento de euforia que atraviesa --"los jugadores han pasado de estar apesadumbrados a estar extramotivados", dijo Marcos el viernes-- para superar al Oviedo en el primer enfrentamiento liguero de la historia de estos dos equipos.
El histórico Oviedo, dirigido provisionalmente por Fermín Alvarez en lugar de Raúl González, es un equipo con jugadores que podrían estar en una categoría superior, como afirmó el propio Marcos, que también dijo que lo que a él le preocupa es su equipo, no el contrario. Es hora de refrendar su currículum.
