El Cacereño comienza la segunda vuelta de la temporada con un duro enfrentamiento ante el Puertollano (Príncipe Felipe, 16.30 horas). El equipo verde encara esta mitad de campeonato en una situación inesperada si nos remontamos al mes de septiembre, cuando iba último. Ahora está decimocuarto con 23 puntos, un baremo que de volver a repetirlo aseguraría estar un año más en Segunda División B tras ascender en el 2009.

Esta posición en la tabla es fruto de los buenos resultados cosechados en las últimas fechas. Los de Angel Marcos llevan seis jornadas sin perder, desde el 22 de noviembre. En distinta posición está el equipo manchego, que ha perdido dos de sus tres últimos encuentros y no consigue la victoria fuera de casa desde la jornada 4, cuando venció al Cerro de Reyes en Badajoz.

Para este encuentro, el técnico local tendrá a todos sus hombres a disposición, con la excepción de Yannick Agro y Leandro Martínez, a los que aún no les ha llegado el transfer . Incluso Ito, que lleva varias semanas entrenando al mismo ritmo que sus compañeros, es uno más. "Ito esta entrenando con los compañeros, puede ser ya uno más de la plantilla", asegura Marcos. También podrá contar con Tomás y Tito, que ya están recuperados y con Diego y Palero, sancionados en la última jornada, aunque deberán esperar su oportunidad desde el banquillo. El lateral lo tendrá complicado con la llegada en su puesto de Julio.

El equipo será parecido al que viene utilizando habitualmente. Chiqui puede volver a ocupar el centro del campo junto a Lolo, tirando a la izquierda a Rocha. Arriba puede debutar el flamante fichaje Salva en lugar de Rubén Jurado. El canterano del Villarreal acompañará a Rai en la punta del ataque cacereño.

El técnico del Puertollano, Benigno Sánchez, tiene la duda en el lateral izquierdo de Pelegrina o Raúl Fernández. Además pierde por acumulación de amonestaciones a Encinas, uno de sus puntales. Para su puesto en la banda derecha luchan Gomis o Acorán, con ventaja para éste, que ya jugó la semana pasada.

ESTADO DEL CAMPO Uno de los inconvenientes que tendrán los dos equipos para realizar buen fútbol será el más estado del terreno de juego, está muy blando después de las últimas lluvias caídas. Además se pronostica agua para el día de hoy por lo que por segunda semana consecutiva el partido se puede ver influenciado por las condiciones meteorológicas.

El entrenador cacereño espera un partido muy diferente al de la primera vuelta porque "las condiciones son distintas". "Ellos están con los mismos jugadores y nosotros hemos cambiado bastante, además fue la primera jornada y estábamos casi en pretemporada".

Del equipo castellano-manchego Marcos destaca su "irregularidad", aunque es un conjunto "con jugadores individualmente muy buenos".

El técnico local da mucha importancia a las jugadas a balón parado algo en lo que "hemos mejorado mucho".