Todo es mejorable. Y más en el mundo del fútbol. El Cacereño ha completado una magnífica primera vuelta de campaña. De las mejores que se le recuerdan en los últimos tiempos. Terminó el año como primero del grupo XIV de Tercera después de hacerse con la cima en el primer tercio de la Liga. Un empate en casa del Villanovense --cuarto clasificado-- no se puede considerar un tropiezo. Pero ha servido para que el Cerro, que permanecía al acecho desde hace varías semanas, le haya sobrepasado como un Ferrari al avistar la más mínima posibilidad de adelantamiento. Los pacenses son ahora primeros y los de Alcázar, segundos a solo un punto. Ambos permanecen destacados en cabeza por delante de CD Badajoz y Villanovense, que también han completado una gran primera mitad de temporada.

En el Cacereño no escuece la pérdida del liderato, pero tampoco van a quedarse quietos. El técnico verde ha reconocido que "todas las plantillas son mejorables y la nuestra también". El club se está moviendo. Haciendo las gestiones necesarias para incorporar en el mercado de invierno algún refuerzo que venga a mejorar lo que ya hay.

Y para ello tendrá que dar bajas. No hay nombres. La entidad no ha querido darlos. Pero sí candidatos. Están en la boca de todos. Son jugadores con los que el entrenador ha contado poco en el transcurso del año y que tendrían las puertas abiertas en caso de que pudieran negociar su pase a otro equipo.

Suker, que se incorporó iniciada la temporada, es uno de los que, hasta el momento, no ha logrado convencer al técnico. No es el único. Arévalo es otro de los que está en todas las quinielas para abandonar el club en breve. El jugador lo sabe y ya ha movido algunas piezas para intentar regresar a Madrid. La gran temporada de Valtierra y Rai y el cariño que la afición tiene por Toni, quien en los pocos minutos que ha dispuesto ha tenido un gran rendimiento, sitúan a Rubén Jurado también en una difícil situación. Podría ser, incluso, que alguno de ellos haya resuelto ya su futuro lejos del Príncipe Felipe cuando a las 16.30 del domingo el Cacereño reciba la visita del Imperio.