Quiere el Cáceres Patrimonio de la Humanidad que el del viernes en Castellón sea un partido más, una final más de las de la recta final de la temporada regular en la LEB Plata. Pero no. Algo especial se cuece en el equipo de cara a esa cita ante el Amics en la que se jugará buena parte de las posibilidades de ascenso directo.
Ñete Bohigas, que ha vivido multitud de encuentros de este tipo, no quiere añadir más presión a una plantilla con varios jugadores jóvenes que, cuando tuvieron que saltar a la pista en condiciones similares en Guadalajara para clasificarse para la Copa, fallaron. "El hecho de ir a Castellón empatados a victorias te da más chance , pero el equipo que pierda no va a decir adiós al primer puesto. Quedan muchos sustos porque la diferencia entre los equipos en la segunda vuelta se aminora. Todos los equipos se juegan algo: la lucha por los playoffs , por no bajar, los que estamos arriba...", sostiene el entrenador en unas declaraciones distribuidas por el club.
Además, no pierde la ocasión para afirmar que "Castellón está un puntito por encima del resto de las plantillas de la liga", pero tampoco de lanzarle un enorme elogio a su equipo: "Se habla que están haciendo una extraordinaria temporada... Pues tan extraordinaria como la nuestra. Llegamos como queremos a este partido. A ver si somos capaces de competir como lo estamos haciendo últimamente. Y si es así, tendremos opciones".
Define además al Amics como "un equipo muy duro, muy competitivo, muy seguro de sus posibilidades. Nos conocemos muy bien. Espero encontrarme a un rival agresivo y que nosotros estemos a ese nivel".
Bohigas considera que "desde aquí hasta el final de temporada, son todo finales. Lucentum Alicante va a tener sus opciones. Y otros tendrán la ocasión de meterse arriba".
Reconoce además que "posiblemente no es el mejor momento de juego" del Cáceres, "pero sí de resultados". De los siete partidos de la segunda vuelta, los verdinegros solamente han perdido uno, ante Marín, y tras desperdiciar 14 puntos de ventaja en los últimos cinco minutos.
La plantilla entrena con normalidad, aunque Carlos Toledo ha tenido que perderse alguna sesión por precaución. Mañana partirá hacia Castellón en un autobús pleno de esperanza.
