El Cáceres 2016 ni comenta el hecho ni ve probable una sanción a su jugador Francis Sánchez, que el pasado domingo, durante el partido ante el León, realizó un gesto de desaprobación a la grada --primero aplaudió y luego dijo "no" con el dedo índice-- que ha centrado el debate alrededor del club en las últimas horas.

La intención de la entidad es echar tierra sobre una cuestión que estima que no ayuda nada al actual optimismo que vive el equipo, noveno en la tabla y con la clasificación para los playoffs encarrilada.

En el representante extremeño de la LEB Oro, aunque no ha ha gustado la reacción del jugador, sobre todo porque se producía mientras era aplaudido por la mayoría del público --anteriormente había sido silbado por una minoría--, se ha mostrado cierta comprensión sobre lo ocurrido. "No se puede jugar cuando a la mínima unos cuantos te están pitando en tu propia casa", argumenta una fuente del club, que ha desaconsejado al jugador realizar declaraciones al respecto para no alargar la polémica.

Ayer mismo, en un acto que estaba programado previamente, el propio Sánchez acudió con su compañero Shawn Taggart para compartir unos minutos con los niños de la escuela infantil ´Veo veo´, que disfrutaron con la presencia de los jugadores.

REGRESO AL TRABAJO Ambos, destaca el Cáceres 2016, acudieron al compromiso a pesar de estar en día libre, ya que hasta hoy el conjunto de Gustavo Aranzana no regresa a los entrenamientos. Será una semana larga, ya que hasta el domingo por la mañana --12.15 horas, en la pista del Mallorca-- no hay partido.

Se espera tener recuperado a esas alturas a Alex González, que sufrió una elongación muscular la pasada semana al resbalar en el charco que produjo una gotera del Pabellón Multiusos y no pudo estar disponible ante el León el domingo.