El Cáceres 2016 juega este mediodía en la pista del Breogán (12.15 horas) con la intención de seguir sumando triunfos. El duelo ante los lucenses aparece como una buena oportunidad para ello, aunque el carácter histórico del rival y una "buena plantilla" pese a su mal inicio, según Gustavo Aranzana, no harán en absoluto fácil la empresa.

Las estadísticas contrapuestas de gallegos y extremeños (7 derrotas y 2 victorias en los locales y 7 triunfos y 2 partidos perdidos de los visitantes) conceden el favoritismo al equipo de Aranzana, que sin embargo sigue cauto en sus discursos pre-partido, y más teniendo en cuenta lo que sucedió en el último viaje, a Alcázar, donde se sufrió la segunda derrota en una competición en la que el equipo está demostrando consistencia.

"Tienen ansiedad, pero son doblemente peligrosos porque querrán congraciarse con los suyos", ha advertido el técnico vallisoletano. Además, el Cáceres se presenta en Lugo con uno de sus mejores hombres, el estadoundense Ryan Humphrey, lesionado. Solamente participará en caso extremo.

Sin embargo, el buen momento de José Angel Antelo, vital con sus lanzamientos exteriores el pasado miércoles en el triunfo ante el Tenerife, permite ser optimistas. Además, McCoy, Sanguino y puede que también Lucio Angulo serán recambios de garantías en la lucha reboteadora, factor clave para Aranzana. "Si somos capaces de dominar los tableros, tendremos mucho ganado", aseguró el pasado viernes por la noche.

JUGAR CON LOS NERVIOS "Les cuesta atacar en medio campo", analiza el entrenador. El técnico del Cáceres espera concienciar a los suyos para protagonizar un buen comienzo que ponga nerviosos a los rivales, que aún no han sido capaces de vencer en su pabellón. "Gestionar bien el inicio del partido será muy importante", declaró Aranzana.

El conjunto extremeño viajó con la esperanza de conseguir otro triunfo que le relanzaría aún más en la clasificación general, en la que sigue, con Murcia, León y La Palma, a la estela de un, hasta el momento, imparable Obradoiro.