QUESOS CERRATO PALENCIA: Dani Pérez (3), Robert Mccarron, Urko Otegui (4), Lamont Barnes (12), Marc Blanch (16) --cinco inicial-- Roma Bas (3), Dani Rodríguez (9), Morey (3), Joan Tomás (15), Fakaude (8) y Reyes (2).

CACERES: José Antonio Marco (0), Ben Mockford (15), Luis Parejo (8), Rolandas Jakstas (8), Víctor Serrano (12) --cinco inicial-- Sergio Pérez (5), Tautvydas Slezas (1), Alvaro Frutos (5), Guillermo Corrales (2), Mansour Kasse (4).

MARCADOR POR CUARTOS: 24-11, 53-28, 72-45 y

ARBITROS: José María Terreros y Esperanza Mendoza. Eliminado: Jakstas.

Como dictaban la lógica y el estado de forma de los dos contendientes, el Cáceres claudicó claramente en pista del líder (78-60). El Quesos Cerrato Palencia, que no era el de pretemporada superado con suficiencia en el Multiusos, ya no es el Palencia de entonces. Los extremeños, desde luego, tampoco.

Por eso no hubo apenas partido o, cuando menos, competencia. No parecía el mejor lugar para resurgir la pista del antiguo pabellón Marta Domínguez (ahora borrado el nombre por cuestiones del presunto dopaje de la atleta) y el Cáceres no tuvo opciones desde el principio.

Todo ya se torció desde ese inicio. Ñete Bohigas tuvo que parar el partido con apenas tres minutos y con un rotundo 11-3 en el marcador a favor de los locales. Daba igual qué jugador: todos anotaban en los palentinos.

La tiranía del líder fue incontestable ante un Cáceres muy flojo entonces, con contínuas pérdidas, muy deslabazado. El tiro exterior palentino funcionó de órdago con triples consecutivos. No había perdón en momento alguno. En el minuto 14, en plena avalancha local, Bohigas solicitó otro tiempo muerto porque aquello era una sangría (36-16). Barnes, Tomas, Dani Rodríguez. Qué exhibición. En los extremeños, apenas Sergio Pérez y Jakstas apuntaban algo. Añaterve Cruz fue baja y se notó.

El equipo de Porfi Fisac talonaba y talonaba a un rival sin respuesta. Aquello crecía hasta el 46-19 (min. 18), pero el Cáceres sacó algo de arrestos y acierto y, tras un parcial de 1-9, se situó 47-28 . Fue un espejismo, porque el Palencia redondeó hasta el 53-28 al descanso. 72 contra 18 de valoración. Brutal.

En la continuación, más de lo mismo. El cuadro local se colocó 62-33 en un periquete ante el caos organizativo de los extremeños. Nuevo tiempo de Ñete.

Mockford mantuvo algo el tipo con sus triples pero todo estaba liquidado con la superioridad del líder (72-45, min. 30). En el último cuarto, ligera reacción para maquillar, con buen nivel de Parejo y Serrano. El Cáceres se puso 74-58 (min. 37). Puro espejismo para los extremeños.