El Cáceres Patrimonio de la Humanidad gana dos posiciones respecto a la jornada anterior (de la décima a la octava) y eso le supone estar de regreso a la zona de playoffs. Su victoria del viernes en la pista del Clavijo (71-76) le ha dado pues muy buenos réditos, sobre todo ahora que puede afrontar con optimismo una cita aparentemente asequible en su pista ante el Sammic (próximo viernes, 21.00 horas).

El de Logroño fue el segundo triunfo a domicilio de los verdinegros, que ya lo habían rozado en las tres salidas anteriores (Castellón, Barcelona B y Huesca).

«Sabíamos que iba a ser duro ante un equipo que tiene tanta necesidad, que iban a competir hasta el final. Mantuvimos la calma, aunque no tanto como yo hubiera querido. Sacamos el partido y lo merecíamos por todos los problemas de lesiones que hemos tenido. Dispusimos de varias oportunidades fuera para ganar y solo lo habíamos logrado en Oviedo. Estoy muy satisfecho», comentó Ñete Bohigas al final del choque. Para el entrenador del Cáceres, la clave estuvo en «llevar el ritmo durante buena parte del partido».

«Ellos tuvieron problemas para leer nuestras defensas alternativas y eso nos permitió dominar. Luego subieron su nivel y empezamos a tener problemas con su rebote ofensivo», apuntó.

¿CAMBIO DE ESTILO? / En la estadística del encuentro llamó la atención el hecho de que el Cáceres tiró mucho más de dos (38 veces) que de tres (16), lo que no suele ser habitual, pero fue algo que, según explicó Bohigas, estaba programado.

«Somos un equipo que gastamos muchos tiros de tres, pero la lectura buena era que fuese al revés: intentar jugar lo máximo posible con los pívots. Nos sentimos más a gusto con los triples, pero habíamos preparado el partido así porque creíamos que teníamos ciertas ventajas en el poste bajo. Nos salió bastante bien», analizó.

Según añadió, «siempre he pensado que Clavijo era un equipo de nuestro nivel». «Al principio de temporada para nosotros era un sueño ir a los playoffs, pero con tantas lesiones el objetivo cambió y era la permanencia. Con once victorias creo que no tendremos problemas, pero podría pasar», apostilló.

Lo cierto es que sería muy raro que el Cáceres tuviese que volver a mirar hacia abajo hasta final de temporada. Y tiene una estupenda ocasión de asentarse entre los nueve primeros si vence al Sammic. Los vascos llegarán en un buen momento también, ya que, en su lucha por la salvación, ayer dieron un buen paso superando al Força Lleida (80-75). El Cáceres ya cayó en Azpeitia en la primera vuelta (79-74).