José Manuel Calderón sigue infalible en los tiros libres y ya está a solamente once de batir el récord de lanzamientos consecutivos en la NBA. Lleva 86 y Michael Williams lo situó hace 16 años en 97.

El extremeño además se mostró feliz y satisfecho por haber participado de nuevo en la segunda victoria consecutiva que consiguieron los Raptors de Toronto al vencer 113-97 a los Kings de Sacramento.

Calderón, que se había perdido 10 de 11 partidos desde el 2 de enero hasta el pasado viernes que regreso para jugar 30 minutos contra los Bulls de Chicago, dijo que todavía no estaba al ciento por ciento recuperado del tirón muscular que sufrió en la pierna derecha, pero cada vez iba mejor.

"No puedo forzar todavía todo lo que quisiera, pero el primer partido jugué 30 minutos y frente a los Kings he estado otros 28 en el campo y eso es lo importante", comentó Calderón, que fue el tercer máximo encestador de los Raptors al conseguir 16 puntos, con ocho asistencias. "Lo importante es seguir avanzando en todos los aspectos".

TRABAJAR DURO Calderón reconoció que el equipo estaba jugando mejor, pero la razón era que todos se sentían unidos y trabajando duro y haciendo bien las cosas para acercarse a los playoffs . "Poco a poco todo va saliendo bien, hemos corregido algunas cosas y sobre todo luchamos de principio a fin, sin descanso, con todos los jugadores que están en el campo", subrayó Calderón, que ha demostrado el gran control que posee cuando tiene el balón en sus manos.

Después de haber completado 58 minutos de juego en el campo, todavía no ha perdido un solo balón y ha sumado 18 asistencias. "Eché mucho en falta el jugar cuando estuve de baja", destacó Calderón. Ahora todo ha cambiado y el jugador español es consciente de que todavía no puede dar en el campo todo lo que le gustaría para ayudar mucho más al equipo, pero sabe también que cada vez está más cerca ese objetivo.