Pocos análisis tan certeros y próximos sobre el Cáceres 2016 como los que realiza Carlos Cherry con su fascinante mezcla de andaluz y norteamericano. Antes de que José Angel Antelo le invite a comer, disecciona con crudeza pero optimismo la primera parte de la temporada de su equipo.

--¿Cómo valora la primera vuelta?

--El entrenador nos ha dado la enhorabuena. Vamos 12-5, quintos, empatados con los terceros, lo que significa ser los primeros de "nuestra liga", por detrás de Obradoiro y Murcia, que están en otro planeta en cuanto a presupuesto. Llegar a la primera ronda de los playoffs con el factor cancha a favor lo vamos a conseguir, pero tenemos que ser ambiciosos y lograrlo en las siguientes eliminatorias. Es para estar contentos, aunque fallamos un par de veces fuera de casa, lo que están haciendo todos.

--¿Y la suya personalmente?

--He tenido problemas físicos, con la lesión de la pretemporada, alguna tendinitis, dolores en la espalda, una contractura el lunes sin ir más lejos... Estoy contento, pero tampoco muy contento. Los compañeros sí están satisfechos conmigo. Hacer jugar a este equipo es complicado: hay muchas bocas que alimentar.

--¿Y eso?

--Hay muchos jugadores muy buenos, con mucho carácter, ganadores. Quizás no he hecho grandes números en cuanto a anotar, pero los compañeros están contentos porque estoy pasando bien. Algunas cosas no se ven pero que llena mucho, porque es estupendo que ellos me feliciten por darles buenos balones.

--Está haciendo 7,5 tiros este año por partido, cuando la temporada pasada hacía 10. Pero también menos asistencias (4,3 a 3,1)...

--El dato de las asistencias no me lo creo mucho. Hay algunas canchas en las que las engordan y en otras no las apuntan casi. Otras veces le doy un pase a Ryan Humphrey y cuando va a anotar, le hacen falta. Y no suma asistencia. En cuanto a lo de los tiros, si juego para mí, puedo meter 20 puntos si quiero, pero en este equipo sería contraproducente. No podemos hacer lo del año pasado, con Francis, que si yo me la tiro y tú te la tiras. El año pasado no había el talento que hay este año. El día que yo me vaya a 20 puntos, mala señal. Tenemos cuatro jugadores que promedian más de 10 puntos. ¿Cómo paras eso? Así se hace un equipo grande.

--¿Cree que pueden dar más, tanto usted como sus compañeros?

--La crítica que yo hago es que somos intermitentes. Jugamos cinco minutos impresionantes, defendiendo, anotando con facilidad, todos a una... nos vamos en el marcador... y entonces desconectamos, empezamos a hacer la guerra por nuestra cuenta. El rival se pone a nuestra altura, el entrenador se cabrea, pide tiempo muerto y nos volvemos a poner las pilas y a ponernos arriba. Nos ha pasado casi siempre.

--Casi ningún partido se ha ganado holgadamente...

--El reto para la segunda vuelta es ése: arrasar, ser un equipo de verdad, que nos tenga miedo Murcia, poder jugar constantemente todos los minutos. Eso es trabajo, entrenamientos. Creo que lo vamos a conseguir. En el momento que perdemos la disciplina, cualquiera nos puede hacer un traje en esta liga.

--¿En qué puesto ve al Cáceres al final de la temporada regular?

--Vamos a ver si conseguimos ser terceros. Burgos creo que va a aguantar ahí arriba y nos va a costar pasarles, pero jugamos allí dentro de poco. León tiene mucho mérito, pero no le veo ahí toda la liga, no nos va aguantar el ritmo.

--¿Se acuerdan mucho de partidos perdidos como los de Alcázar y Palencia?

--Sobre todo del de Palencia, que nos hizo daño. No salimos a competir, salimos muy relajados pensando que íbamos a ganar con la gorra y no fue así. El de Alcázar no tanto, porque de todos los finales apretados es el único que hemos perdido. ¿Si fue culpa mía? Me despisté y nos clavaron el triple, pero eso puede pasarle a cualquiera.

--Por cierto, hay quien le reprocha que no defiende...

--No quiero escurrir el bulto, pero habría que coger estadísticas de equipos contra los que hemos jugado y ver los puntos de los bases. La orden de defender cosas como los bloqueos directos es pasar por detrás. Si te la clavan así, no puedes hacer nada. Además, cuando defiendo mal, el entrenador no se corta y me sienta. La defensa es un tema colectivo. No tenemos una mala defensa. En partidos igualados, cuando nos hemos puesto, lo hemos hecho realmente bien.

--¿Cómo ve a su suplente, David Mediano?

--Creo que está cumpliendo con creces, sobre todo los días en los que yo he faltado. Yo le daría un ´10´. En el inicio de liga, se comió el marrón y lo sacó para adelante. Está jugando con gran humildad. Pasó de jugar todo en LEB Plata a venir aquí de otra manera. Un ejemplo del buen rollo del equipo: alguna vez me ha mandado mensajes felicitándome por partidos míos. Ryan también lo ha hecho.