Otra salida en el Cacereño. Tras la cesión de Javi Durán al Arroyo, ayer se conoció que otro joven centrocampista, Carlos López, ha encontrado acomodo en el Unionistas de Salamanca.
El futbolista, recién llegado este verano desde el filial del Real Zaragoza y con pasado en el Arroyo y el Diocesano, no estaba satisfecho con los minutos de juego que había dispuesto hasta ahora y veía que su situación se iba a agravar por la incorporación de nuevos futbolistas dentro del renovado proyecto del club verde. El entrenador, José María Rebollo, que en principio aseguraba que contaba con él, ha dado el visto bueno a su marcha, entendiendo el razonamiento que ha esgrimido.
El Unionistas es uno de los dos clubs que intenta recoger la ‘bandera’ del fútbol en Salamanca tras la desaparición de la histórica UDS. La pasada campaña disputó la fase de ascenso a Segunda B, pero no consiguió pasar de la segunda ronda. Ahora es undécimo en la clasificación tras un inesperado flojo inicio (dos victorias, un empate y dos derrotas), por lo que ha buscado refuerzos en el mercado.
Falta por resolver el futuro de dos futbolistas a los que se les ha enseñado la puerta de salida, Mario Hormigo y Kevin Saldaño, que tienen varias ofertas.
