La subida Pedestre al santuario de la Virgen de la Montaña de Cáceres sigue siendo una cita clásica en el calendario del atletismo regional. Ayer, de nuevo casi un centenar de participantes lucharon en la corta, pero durísima carrera cacereña. Los rostros de los atletas en la llegada a la cima eran de auténtica extenuación.

La climatología durante la mañana de ayer no quiso apiadarse de los deportistas que retaron las empinadísimas rampas hasta la meta.

El ganador de la vigesimoprimera edición fue Luis Mejías Sosa, del club Don Benito. Marcó un tiempo de 11.26 y dio brillo a una emocionante carrera que sólo se resolvió en los últimos metros. El atleta dombenitense supo dosificar y llegó más fresco a la recta final, que se le atragantó a Félix Manuel Muñoz. El atletas del Vegas Altas tuvo que conformarse con la segunda plaza (11.31) tras ir liderando la carrera durante casi todo el tiempo.

"Al final he llegado bien y cuando he esprintado, él no ha podido seguirme", resumía Mejías. Antonio Delgado, de La Serena, marcó un tiempo final de 11.33. Precisamente él posee la mejor marca de la Subida Pedestre. En 1992, Delgado paró el crono en 10.42 y once años después sólo Antonio García fue capaz de igualar el tiempo en 1997.

EN LAS CHICAS

Raquel Gómez fue la primera fémina en asomarse por la línea de meta. Lejos del récord que ostenta Rocío Martínez (12.22 hace dos años), la deportista del club Vegas Altas llegó 14 minutos y 38 segundos después de tomar la salida. La atleta-árbitro Paloma Quintero concluyó segunda.

Los veteranos sigue ejerciendo de valientes y año tras año compiten en la dura prueba. Pedro Monzón, que ha participado en las 21 ediciones, Isidro Ortega, con 63 años, o Agustín Fernández, que fue el triunfador en esta modalidad, dieron colorido de nuevo a los 3.000 metros de recorrido de la prueba.