El problema de iluminar una pista de F-1 parece resuelto en Singapur. 3.180.000 watios, 6.300 metros de andamiaje de aluminio, 26.283 metros de fibra óptica, 108.423 metros de cable eléctrico, 1.500 proyectores, 240 pilones y 12 generadores de energía se encargan de dotar a la pista de 3.000 lux. Para situar este parámetro hay que recordar que el salón de una vivienda familiar registra una media de 50 lux. Pero los cálculos del circuito se refieren a una noche despejada. ¿Y si llueve? "Nosotros manejamos un pronóstico del 60% de lluvia", dice Ross Brawn.

El miércoles mismo una monumental tromba de agua cayó sobre el circuito entre las nueve y las 12 de la mañana. Fuentes de la FIA aseguran que, en el caso de un fuerte chubasco, habría que retrasar la carrera, pero es una decisión que no encaja en la mentalidad de Bernie Ecclestone, el dueño de los destinos de la F-1, que ha impulsado las carreras nocturnas con el fin de disfrutar de una buena banda horaria en Europa que aumente las audiencias de televisión. Sabido es que el gran jefe quería haber sido el primero en materializar esta idea pero el Mundial de motos y los jeques de Qatar se le adelantaron al organizar, de noche y bajo los focos, la carrera que abría el campeonato de MotoGP de este año. Cuyo éxito fue rotundo, entre tras razones porque allí no iba a llover.

El fabricante de cascos Schubert se ha adelantado a los acontecimientos y ha trabajado en un nuevo modelo pensando en una carrera nocturna con lluvia. ¿Cómo evitar los reflejos de la luz en las gotas de agua? Ese es el gran problema para el que Schubert ha encontrado la solución al diseñar una visera totalmente antirreflectiva y polarizada tras la experimentación de varios materiales con base de policarbonatos. Michael Schumacher ha sido el probador de estas viseras fabricadas a partir de las que utilizan los pilotos de cazas militares.

Problema habitual

Los conductores de turismos conocen bien los problemas cuando se une la noche y la lluvia: el primero, el reflejo; el segundo, el vaho. Para evitar el empañamiento, Schubert ha ideado una visera térmica, que con una pequeña batería puede igualar la temperatura exterior e interior calentando la visera hasta los 30 grados. Kimi Raikkonen, Felipe Massa, Nick Heidfeld, Mark Webber y Nico Rosberg será los primeros beneficiados de esta tecnología.