En uno de los mejores momentos que vive el Real Madrid, que tras su derrota en Getafe, ha encadenado tres victorias consecutivas, ha estallado la polémica. El delantero italiano Antonio Cassano ha sido apartado temporalmente de los entrenamientos del primer equipo "por indisciplina". La entidad blanca lo ha hecho oficial a través de su web. Y el tono no puede ser más claro:

"El club ha adoptado la decisión de apartar temporalmente de los entrenamientos de grupo a Antonio Cassano por un acto indisciplinario (falta de respeto al entrenador), acontecido el pasado sábado después del partido ante el Nastic".

Prosigue el comunicado del Real Madrid, diciendo que "se le aplicará la correspondiente sanción económica que estipula el régimen interno del club".

El detonante, según todos los indicios, ha sido la situación que vivía Cassano, relegado al ostracismo, tras una pretemporada en la que Capello había contado con él, y un inicio de Liga bastante esperanzador. El jugador habría insultado gravemente al entrenador italiano, por no contar con él en los últimos partidos, sobre todo teniendo en cuenta la buena relación que les unía en el pasado.

En los últimos encuentros el futbolista transalpino parece haber perdido la confianza del técnico Fabio Capello y el sábado protagonizó una de las denominadas ´cassanattas´, como se conocía a sus rabietas cuando estaba en Italia y que todavía no se habían vivido en España.