Cientos de aficionados acudieron al estadio Santiago Bernabéu para ver en directo el último entrenamiento de la selección española, que con Luis Aragonés al frente, se ejercitó por última vez antes del importante choque que jugarán frente a Dinamarca.

Durante cerca de una hora el público comprobó una vez más que el seleccionador nacional sacará de inició a los jugadores que viene anunciando en sus sesiones desde hace algunos días. La nota más destacada fue la presencia del delantero Fernando Morientes, que se entrenó en un hipotético equipo titular, y del que se vio que está totalmente recuperado de sus pequeñas molestias musculares.

Pero fue Fernando Torres el protagonista de la sesión. El futbolista del Atlético de Madrid, que entrenaba con el equipo de los suplentes, marcó dos buenos goles en el "partidillo" que disputaron los hombres de Aragonés, y al que sólo faltó el defensa Carles Puyol, que abandonó la concentración por la muerte de su abuelo.

Con el cartel de "no hay billetes" colgado en las taquillas del estadio del Real Madrid, cerca de 80.000 aficionados llenarán las gradas para animar a la selección española. Se espera que casi 5.000 espectadores sean daneses. Las últimas 800 entradas fueron vendidas por la tarde y la expectación podría hacer aparecer a los "reventas", que todavía no han hecho acto de presencia en los alrededores del Santiago Bernabéu.