El Real Madrid recibe al Partizán de Belgrado con el claro objetivo de conseguir la victoria y los puntos de la tranquilidad, que aunque no clasificarían al equipo matemáticamente para los octavos de final de la Liga de Campeones, si le dejarían en la mejor de las posiciones para lograrlo.

Carlos Queiroz, entrenador del Real Madrid, no piensa hacer concesión alguna ante el Partizán, pese a que el equipo serbio parece el rival más débil del grupo y sólo ha conseguido un punto en las dos primeras jornadas.

Aunque el técnico portugués no ha confirmado la alineación, siguiendo su costumbre, de sus declaraciones, "es necesaria la estabilidad y la continuidad para seguir mejorando", se deduce que jugarán los mismos que ganaron el pasado sábado en Balaídos al Celta.

En la convocatoria están los mismos dieciocho jugadores que viajaron el sábado a Vigo y sólo se han quedado fuera, los dos lesionados, Rubén y Miñambres, y el tercer portero, Carlos Sánchez.

La única duda llega de unas pequeñas molestias en el muslo derecho de David Beckham, que confirmó el entrenador y a las que no dio mayor importancia.

El capitán del equipo, Raúl González, también habló de la importancia de los tres puntos para las aspiraciones del equipo. "Si ganamos nos quedaremos muy cerca de la clasificación para octavos de final y, sobre todo, nos daría tranquilidad para poder pensar en la Liga", comentó.

SIN GOLEADOR

El Partizán no llega a Madrid en el mejor de los momentos y no podrá contar con uno de sus mejores jugadores, el delantero goleador Andrija Delibasic, que tendrá que cumplir un partido de sanción por acumulación de amonestaciones.

Otro aspecto negativo para los serbios es la lesión de su portero titular, Ivica Kralj, que se suma a las de Milovan Milovic y Milivoje Circovic. Taribo West, Branko Savic y Branimir Bajic sufren molestias intestinales, aunque estos tres últimos confía su entrenador, Lothar Matthaus, poder alinearlos en el Bernabéu.