Casi sin darse cuenta, Julio Cobos ha colgado las botas. Han pasado ya tres semanas desde entonces y dice que es ahora cuando está empezando a ser consciente de todo lo que ha vivido este mes. Un día está entrenando con el Santa Amalia, su último club como futbolista, y al día siguiente está en el Príncipe Felipe, dando instrucciones a la plantilla del Cacereño como segundo entrenador del club, a las órdenes de José Luis Montes. "Fue todo muy rápido", cuenta el protagonista, que recuerda que en ese momento no se dio cuenta de que "ya no iba a volver a jugar al fútbol" profesional.

Pero no se arrepiente, porque a sus 39 años ya no estaba lejos la retirada y porque llevaba ya un tiempo preparándose para ser entrenador. "Era lo que tenía pensado, aunque quizás no ahora mismo", confiesa, "pero surgió la oportunidad" y no quiso dejarla escapar, porque, entre otras cosas, la oferta le permitía volver "a un gran club" en el que vivió --e hizo vivir a los aficionados-- muchos buenos momentos como futbolista.

´Enlace´ con la plantilla

Ahora ha empezado una nueva etapa. "Distinta, pero muy parecida", porque sigue haciendo lo que le gusta, reconoce, y porque junto a Montes está "aprendiendo mucho". Aún es casi un futbolista y eso le ayuda para entenderse con la plantilla, a la que trata de transmitir sus catorce años de experiencia en Segunda B. Y es el enlace entre los jugadores y el técnico, "un profesional exigente, como deber ser, porque para lograr resultado hay que trabajar mucho y bien", dice Cobos.

Sigue adaptándose a su nueva vida y aún recibe llamadas de amigos para felicitarle. "Me dicen que ahora voy a empezar a envejecer más rápido", explica riéndose, aunque comprende por qué le dicen eso. "Cuando eres futbolista te centras en jugar, en lo que te manda el entrenador. Sales al campo y los nervios desaparecen. Pero en el banquillo no, el estómago se te encoge durante los noventa minutos. Sufres más, mucho más".

En la parcela deportiva destaca, además de su buena relación con Montes ("con el que antes solo había cruzado cuatro palabras cuando nuestros equipos se enfrentaron"), que los resultados, "por suerte", les están acompañando. "Está plantilla tiene muchas ganas de trabajar y se ha adaptado muy bien a lo que les pide José Luis Montes, han adquirido rápido los concepto".

Sobre el próximo partido ante el Cerro de Reyes (domingo, 12.00), cree que será difícil, "porque el José Pache en un campo difícil, aunque los últimos resultados allí del Cacereño no han sido malos", recuerda. También lo ve complicado Montes, que espera un partido "muy físico, en el que será muy importante estar atentos a las segundas jugadas. Seremos capaces de adaptarnos al terreno de juego", indica.

Para este partido el Cacereño recuperará a Mario Carrizosa y a Dani, ausentes por sanción en el encuentro contra el Depor B. Rai continúa con su recuperación ("precipitarnos en su reaparición podría ser un error", dice Montes); Sergio y Carlos continúan con molestias, al igual que Gonzalo, que tiene difícil su participación en el partido del domingo.