El Comité Olímpico Internacional (COI) no quiere que haya una sola duda sobre los resultados en los Juegos de Pekín. La aparición de la nueva EPO, la de tercera generación, conocida como CERA (Continous Erythropoietin Receptor Activator), en los controles antidopaje del Tour, ha alarmado a los máximos dirigentes del organismo. La orden, sin precedentes en la historia del deporte mundial, se cursó ayer. Se reanalizarán por lo menos 1.000 muestras de las 4.770 tomadas en la capital china en el mes de agosto.

La mayoría de laboratorios reconocidos por el Comité Olímpico Internacional, entre ellos los de Barcelona, París y Lausana, están perfectamente preparados para identificar la CERA.

EL ORIGEN DEL ESCANDALO La semana pasada en Ch tenay-Malabry, a las afueras de la capital francesa, se reabrió el proceso para analizar la sangre de un grupo de corredores --la medida alcanza a una decena de ciclistas que participaron en la ronda.

Enseguida se identificó la presencia de CERA en la sangre de Leonardo Piepoli y Stefan Schumacher. Estos dos casos se unieron al de Riccardo Riccò, que ya dio positivo en julio durante la disputa del Tour.

El Comité Olímpico Internacional sabe que una sustancia supuestamente indetectable es una golosina para los deportistas que quieren mejorar el rendimiento utilizando productos prohibidos.

La IAAF (Federación Internacional de Atletismo) ya obró de forma parecida en el 2003 cuando reanalizó todas las muestras del Mundial de Atletismo celebrado en París, tras estallar en California el escándalo del laboratorio BALCO, que creó un anabolizante sintético, usado por atletas estadounidenses, que se denominaba tetrahidrogestrinona (THG).

QUE NO QUEDEN DUDAS Ahora se pretende disipar cualquier sospecha. Por esta razón principalmente, y amparándose en la legislación del Código Mundial Antidopaje, que permite guardar muestras de orina y sangre durante los ocho años siguientes a una competición, se buscará CERA en la sangre de un grupo formado por un millar de deportistas.

Los análisis, según ha podido saber este diario, se restringirán a aquellos competidores que hayan presentado algún parámetro anormal en la sangre. La mayoría de los deportistas afectados son especialistas en modalidades de resistencia.