El Sevilla, vigente campeón de la Copa del Rey, es el último obstáculo antes de la ansiada final para el Real Madrid de José Mourinho, con el que el club ha vuelto a valorar una competición que no gana desde 1993.

El partido de ida de las semifinales coperas llega caliente. El papel con lo que el Madrid interpretó como errores arbitrales durante el duelo liguero que sacó Mourinho a rueda de prensa, y la campaña sevillista para llenar el estadio con un anuncio que ha levantado revuelo por su mensaje final en portugués, aumentan el ya de por sí ambiente especial que siempre rodea este encuentro.

El Sevilla está ilusionado en ratificarse como el gran especialista de Copa en los últimos años. Desde que en las semifinales de 2004 fueron apeados precisamente por el Madrid, ha jugado posteriormente, incluida ésta, otras cuatro semifinales, han llegado a dos finales y las dos las han ganado.

Mientras, el Madrid podrá mostrar en Sevilla su centro del campo titular y más descansado. Regresa Khedira recuperado de un fuerte golpe y hará pareja con Xabi Alonso.