La ciudad suiza de Zúrich y la cenicienta del Grupo C es el punto de partida de un Real Madrid obligado a recuperar el prestigio perdido en Europa, en una Liga de Campeones añorada, que esta edición cobra aún más relevancia por la posibilidad de conquistar la soñada décima en el Santiago Bernabéu, escenario de la final, el 22 de mayo del 2010.

Estreno de Champions del ambicioso proyecto diseñado por Florentino Pérez, en casa del rival más débil, el Zúrich, debutante en Liga de Campeones que quiere saborear su primera participación en el nuevo formato ante un grande del Viejo Continente, un Madrid necesitado de éxitos europeos tras cinco años estancado en octavos de final.

Llega el Madrid del chileno Manuel Pellegrini en buen momento a la cita. El encaje de tantas piezas nuevas --hasta ocho fichajes--, la llegada de un nuevo sistema y otra filosofía de juego, se va integrando con buenos resultados. El pleno de victorias en Liga mantiene a los madridistas compartiendo liderato, dejando la sensación de fuerza de toda la plantilla, con más fondo de armario para Pellegrini, que hasta puede rotar sin que baje el nivel.

Lo hizo en la visita al Espanyol para disponer del mejor equipo posible en el estreno europeo. No será su once ideal porque sigue faltando Sergio Ramos, que cuenta los días para reaparecer superada su tendinitis. Pero se acerca mucho. Hasta regresa el portugués Pepe, sancionado aún en Liga con dos partidos por cumplir, pero no en Europa, donde volverá a jugar un partido oficial de blanco cinco meses después.

La apuesta por el fútbol de toque de Pellegrini y el juego de ataque, lo representará en Zúrich el equipo inicial en el que se juntarán en el campo a Cristiano Ronaldo, Kaká, Raúl y Benzema. No hay dudas en ataque y solo una en defensa, donde dependiendo de la evolución del esguince de tobillo de Raúl Albiol, jugará o dejará su puesto al alemán Christoph Metzelder.

Delante tendrá al equipo que parte como más débil de grupo, el Zúrich, que superó con anterioridad al Maribor esloveno y al FK Ventspils letón y que será empujado desde la grada en su primer partido en la competición más prestigiosa de Europa, tras agotarse las entradas en menos de una hora.

Ganador de doce Ligas y siete copas de Suiza, el FC Zúrich tiene como máximo logro europeo dos semifinales en la antigua Copa de Europa. En 1964, contra el Madrid de Di Stéfano, y en 1977 donde cayó ante el Liverpool.