Los ojos de los aficionados se fijan todos los años en los corredores más prometedores del pelotón nacional para intuir a las futuras estrellas. En esta edición de la Vuelta muchos miran a un joven extremeño, de padres caurienses: José Antonio Pecharromán, del Paternima-Costa de Almería y dorsal 131.

La prensa ha hablado mucho de este corredor nacido en Cáceres hace 25 años. Actualmente ciclista vive en Daimiel (Ciudad Real), donde sus vecinos ya han formado una peña que le sigue como si fuese una estrella. De él se empieza a comentar que puede llegar muy alto dentro del ciclismo profesional. Periodistas y fotógrafos deportivos ya están detrás de él. Su acuerdo con el Quick Step para la próxima temporada está cerca de culminarse.

José Antonio Pecharromán lleva desde el 2000 como corredor profesional. Las lesiones hasta la fecha han sido sus peores aliados. Por una osteopatía de pubis en dos ocasiones ha tenido que pasar por el quirófano. Pero para él todo ha cambiado. Hace poco se ha impuesto de forma brillante en la Euskal Bizikleta y después en la Volta a Cataluña. Hasta la fecha está demostrando ser un gran rodador y un fenomenal contrarrelojista. Los expertos del mundillo amateur también hablan muy bien de él.

¿PODIO?

Miguel Moreno espera de él lo mejor. Para su equipo es la mejor carta que expone. La escuadra es modesta y por primera vez disputa la Vuelta pensando en el podio de Madrid del día 28... con Pecha .

"Creo que en la general no estaré, espero luchar por una etapa", explicaba el ciclista en su presentación en Gijón.

Un problema en julio ha hecho que el corredor extremeño llegue a la gran ronda española un poco fuera de forma, pero espera dar a los extremeños el triunfo de una etapa. "No sé cuál será. Espero que una bonita, pero la carrera es la que tiene que decidir y las condiciones físicas", indicaba el corredor a EL PERIODICO EXTREMADURA en la gala previa al inicio de la carrera.

LOS GRANDES DEL PELOTON

Casi todos los corredores coinciden que la Vuelta de este año puede volver a ser para un español. Y uno de ellos es el corredor bejarano Roberto Heras, del US Postal Service, quien afronta la prueba tras haberse preparado por las carreteras del norte de Cáceres, de donde es todo un asiduo, según confiesa.

"Es una vuelta muy compensada. No es como otros años, pero tiene etapas picadas con Pirineos. Es un poco atípica, pero hay que aceptarlo", dice Heras, que pronostica que "la crono de Abantos puede ser buena, siempre y cuando no pueda en las otras contrarrelojes".

Otro de los corredores que utiliza carreteras extremeñas para entrenar en Santi Blanco. El corredor de Puerto de Béjar también opina lo mismo y espera ganar una etapa mítica, como lo hizo el año pasado en La Covatilla.

Por otro lado, Oscar Sevilla, opinaba que "va a estar muy reñida y ajustada. Va a ser espectacular, sobre todo para los aficionados". Su director en Kelme, Vicente Belda, comenta que "la Vuelta es igual a la del año pasado. La subida a Abantos nos beneficia".El ganador de la ronda pasada, Aitor González, confía en reeditar su victoria ahora con el Fassa Bortolo. Explica que

"en principio me gusta la Vuelta, está compensada y espero repetir triunfo otra vez en Madrid, pero hay gente muy buena"