AL-QAZERES: Fatou Dieng (5), Nina Bogicevic (12), Vero Sánchez (9), Callan Taylor (4), Karla Gilbert (16) --cinco inicial-- Andrea Vilaró (2), Yaiza García (11), Marta Avila (0), Marta Tudanca (16), Jennifer George (1).

ZAMARAT: Natalie Van den Adel (0), Sandra Pirsic (14), Sofia Gomes (8), Ylenia Manzanares (1), Daria Miloszynska-Zwolak (16) --cinco inicial-- Marina Delgado (12), Dragana Svitlica (6), Caroline Durbin (0).

MARCADOR POR CUARTOS: 16-24, 30-33 (descanso), 53-46 y 76-57 (final).

ARBITROS: Zamorano y Zamora. Eliminadas: Gomes y Van den Adel.

Quinta victoria de la temporada del Al-Qazeres, que alimenta así las opciones de permanencia en la Liga Femenina. El Zamarat puso el nudo en la garganta de las cacereñas durante muchos minutos, pero acabó cediendo (76-57), arrollado por el hambre de triunfo de su oponente.

Fue un partido extraño, algo discontinuo, a base de rachas, que hasta tuvo la tonta anécdota de que los árbitros se apellidaban Zamorano y Zamora... jugando el equipo de esa ciudad. Como suele ser habitual, las locales salieron nerviosas, como desubicadas, sintiendo que era una oportunidad demasiado importante como para perderla.

Su juego mejoraba respecto al desastre de la semana pasada en la cancha del UPV, pero el marcador no terminaba de premiarlo (8-15, min. 6). Lo mejor era que se encontraba muy bien el camino hasta Karla Gilbert, decepcionante en San Sebastián. Sus puntos mantenían al equipo en el partido, pero una canasta de las zamoranas justo al final del cuarto situaba un preocupante 16-24.

La receta era obvia: había que mejorar en defensa y se consiguió. Pero para eso, el Al-Qazeres tuvo que sentirse contra las cuerdas: 20-33 (min. 15). Poco afortunada en muchos momentos de la temporada, Fatou Dieng cogió las riendas admirablemente para empujar la situación a un escenario más apacible de cara a la segunda parte (30-33 al descanso). Fantástico cierre por parte de Nina Bogicevic, por cierto.

EL DESPEGUE La sensación general era que, a la vista que el Zamarat confirmaba los augurios de que su intensidad no sería máxima al no jugarse gran cosa en la clasificación, un nuevo acelerón de las chicas de Jacinto Carbajal podría resultar decisivo.

Así fue. Tras un atropellado intercambio de canastas, el Al-Qazeres se puso por delante después de mucho tiempo con el 43-42 (min. 28). Fue un periodo inspirado de Marta Tudanca, otra jugadora a la que se necesitaba recuperar. Estuvo bien apoyada por Yaiza García. La garra que faltaba en las visitantes sobraba en las anfitrionas.

El último cuarto se afrontó con un margen que si bien no era definitivo (53-46), sí otorgaba la confianza necesaria a un equipo que, al menos hasta anoche, carecía de ella. Con Carbajal dando con la tecla en las rotaciones y el grado de implicación de las suyas no encontrando límite, ni siquiera el final tuvo que ser dramático.

Con los 20 puntos de diferencia y el triunfo ya en el bolsillo, era el momento de gustarse, de lograr autoestima, de ofrecer una victoria relajada a los sufridos incondicionales. Hasta hubo la posibilidad de hacer debutar a la joven canterana Marta Avila. Mann Filter y Campus Promete juegan difíciles partidos ante Avenida y Conquero. La permanencia es posible.