El Cacereño juega mañana un duelo vital en la lucha por la permanencia ante el Marbella y lo hace con el recuerdo aún de las decisiones de los árbitros los últimos partidos. Actuaciones arbitrales que no han gustado nada en el club verde.

Las quejas del entrenador, Angel Marcos, tras el partido ante La Roda eran mayúsculas. Incluso, el técnico habló de remitir una queja formal a la federación, "como ya lo han hecho otros equipos", dijo. Ante los manchegos fue anulado un gol en los últimos minutos a Gonzalo, que pudo suponer el empate. También hubo un posible penalti que se fue al limbo. Ante La Roda no solo se dejó de sumar un punto, sino que un rival directo por la permanencia sumó dos más. De estar seis puntos por encima a estar solo tres. Un gol, mucha diferencia.

En los partidos anteriores también se sufrió con arbitrajes bastante polémicos. Ante el Jaén se sufrió al final del encuentro cuando tanto Sutil como Joel Johnson pudieron ser expulsados. Frente al Cádiz, aparte de las numerosas faltas que señaló el árbitro en el juego aéreo, se escamoteó un penalti a Valverde, cuando el marcador era 0-1 y Gonzalo aún no había sido expulsado. Frente al Betis B, Toto se marchó a los vestuarios por doble amarilla.

Pequeños detalles, piensan en el club verde, que pueden marcar el devenir de una temporada cuando las distancias entre los rivales son mínimas y se acerca el final con todas las incógnitas pendientes.