Un día después de declarar ante la jueza por el presunto fraude a Hacienda de 14,7 millones de euros, Cristiano Ronaldo ha vuelto a dejar claro que está encantado de conocerse y que una buena parte del mundo no le entiende o está en su contra solo por la luminosidad que desprende.

A medio camino entre el victimismo y ese narcisismo del que le resulta imposible desprenderse, el astro portugués ha vuelto a dejar una de esas frases lapidarias que suenan a pataleta de niño mimado. «Lo que molesta a la gente es mi brillo. Los insectos solo atacan a las lámparas que brillan», afirmó el jugador del Madrid en Instagram. Una reflexión que bien podría recordar a aquella que realizó hace casi seis años para criticar a los que le pitan. «Me silban porque soy guapo, rico y un gran futbolista. Me tienen envidia. No tengo otra explicación», dijo entonces Cristiano.

Ronaldo también ha mostrado fotos ejercitándose por su cuenta, aunque hasta el próximo sábado no tendrá que incorporarse a los entrenamientos con el Madrid.

Bale se retira del entrenamiento

Mientras tanto, sus compañeros continúan en Estados Unidos. Del entrenamiento de ayer en Chicago se retiró Gareth Bale quejándose del talón de Aquiles. El galés acumula más de 15 lesiones desde que llegó al Madrid en el 2013. Su equipo cierra el jueves a las tres de la madrugada la gira americana ante el combinado de estrellas MLS All Stars, que contará con la presencia de David Villa y Kaká, entre otros.