El Madrid, empujado por Cristiano Ronaldo, mantiene la presión sobre el Barcelona a falta de dos jornadas. El luso ha marcado siete goles en cuatro de los cinco encuentros que el Madrid ha jugado tras el clásico. Algo que ha hecho que todos se rindan a su poder desestabilizador. "Es un líder natural. Se siente superior porque lo es. Sabe ver las carencias del equipo e intenta solucionarlas", decía ayer Granero.
A dos jornadas para que termine la Ligas más bipolar de los últimos años, el Madrid sigue esperando un traspié del Barça. La última bala está en el Sánchez Pizjuán, donde la plantilla blanca espera una batalla muy dura para los azulgrana. "Tenemos confianza de que el Sevilla pueda hacer un buen papel, pero cometeríamos un error si no pensamos en nuestro encuentro ante el Athletic. Parece imposible que con tantos puntos no seamos líderes, pero es que hay un equipo que lo está haciendo un poquito mejor", concluyó Granero.
El mensaje del centrocampista coincide con el de Valdano, que asegura que el Madrid "no jugará en Sevilla, sino en el Bernabéu ante el Athletic". El director general destacó que "el equipo está muy centrado en el trabajo y en eso ha demostrado su profesionalidad. Ha sabido abstraerse de los rumores y centrarse en la competición", dijo.
