El equipo español de piragüismo cerró las eliminatorias cumpliendo el primero de los pasos marcados en un camino que tiene como meta reencontrarse con la medalla olímpica, a la que ya tienen opciones de llegar los cuatro barcos que se han clasificados para finales.

David Cal, el más arrollador del equipo español, estará en las finales de C-1 en 500 y 1.000 metros, y el K-2 de Beatriz Manchón y Teresa Portela lo hará en la de 500, en la que también competirá el K-4 damas de Isabel García, Beatriz Manchón, Jana Smidakova y Teresa Portela.

Estos cuatro barcos, al haber logrado la calificación directa, en el caso de David Cal con el reconocimiento de que sólo accedía el primero de cada serie, evitan una prueba cada uno de ellos, ya que no tendrán que disputar las eliminatorias, con lo que apenas han hecho su presentación cuando podrían saborear una medalla olímpica.

También tomaron parte en las eliminatorias de 500 metros, otras tres embarcaciones españolas, todas ellas con perspectivas de lograr el pase a sus respectivas semifinales.

Carlos Pérez Rial fue quinto en su estreno, el K-2 de Fran Llera y Damian Vindel, tercero, y cerraron la participación Alfredo Bea y David Mascato, sextos en C-2.