Los cuatro clubs extremeños que militan en el grupo IV de Segunda B acaparan cerca del veinticinco por ciento de las 58 tarjetas rojas mostradas por los árbitros tras la disputa de las doce primeras jornadas de liga. Poco más 75 por ciento restante de expulsiones (otras 44 tarjetas rojas) se las reparten, de forma más equitativa, los dieciséis clubs que completan el grupo.

El Badajoz, junto con el Córdoba, son los líderes de esta negativa clasificación con seis expulsiones cada uno. En el polo opuesto, se encuentra el Ecija, que todavía no sufrió ninguna expulsión.

Mérida y Díter Zafra también sufrieron el azote de los árbitros en forma de expulsiones. Así, el Mérida vio cuatro tarjetas rojas por tres el Díter. En el caso del Mérida, curiosamente, el comité de Competición anuló las dos rojas mostradas a Jahic y Benjamín en el duelo ante el Linares.

Mientras, el Extremadura es el extremeño menos castigado por los árbitros, pues sólo sufrió una expulsión.

Otro capítulo aparte es el de las expulsiones de jugadores contrarias. El Cartagena, que también lidera el grupo, es el que más se ha beneficiado de las rojas a jugadores de los equipos rivales con un total de diez, es decir, una media de casi una expulsión a su favor por partido.

El equipo que le sigue, curiosamente, es el Linares, segundo en la tabla, testigo de siete expulsiones. La tercera plaza, con cinco expulsiones a favor, la comparten Marbella y Mérida. Badajoz y Extremadura se beneficiaron de tres expulsiones por dos el Díter Zafra.

En el balance de expulsiones a favor y rojas recibidas, entre los extremeños, los únicos beneficiados son Extremadura y Mérida con dos y una, respectivamente. Mientras, el saldo del Díter es de menos una (una expulsión más en contra que a favor) y el del Badajoz es de menos tres.