Tiene 25 años, es madrileño, está casado, vive en Plasencia y trabaja en una empresa de informática y videojuegos. Aparentemente, Alvaro García Rebato podría pasar por un chico más, pero en pocos días puede convertirse en el David Beckham extremeño. Al igual que el inglés, ha pasado por el club blanco y no le avalan grandes triunfos, pero el marketing creado alrededor suyo y el hecho de que sea el único futbolista de la región que cuenta con el patrocinio de cinco empresas --4 de Plasencia y 1 de Madrid-- le han convertido en pocos días en el rostro de noticias de diarios deportivos nacionales.

"Estoy esperando que vengan los periodistas del Marca, me van a hacer una entrevista", comentaba ayer tarde por teléfono desde Plasencia mientras se le entrevistaba para EL PERIODICO EXTREMADURA.

Jugará en el Coria

El Coria es el equipo que ha tenido la fortuna, al menos por el teórico efecto mediático, de quedarse con Alvaro para la próximo temporada. "Me caen bien los directivos del Coria, son buena gente y prefiero quedarme en un equipo que está cerca de mi casa", manifestó para justificar su decisión de quedarse en el conjunto cauriense tras rechazar, según él, una golosa oferta económica del Leganés o la posibilidad de jugar con el Cacereño. "Hace 4 meses estuve reunido con los directivos del Cacereño, estuve en fase de pruebas, pero opté por el Coria", insistió.

Asegura que le ha preparado el exmadridista Paco Buyo y que ha compartido entrenamientos con Iker Casillas. "Iker y yo éramos vecinos, él vivía en la calle de Las Palmas y yo en la de la Cruz", comenta. Aunque sabe que codearse con el portero internacional no le garantizará la titularidad en el Coria. "Mi puesto me lo quiero ganar en los entrenamientos y lucharé por ello", afirma.