Tras ser expulsado David Pirri en el minuto noventa y siete de partido con roja directa por insultar al árbitro, el Mérida presentó un recurso a apelación argumentando que el lateral emeritense nunca quiso insultar al colegiado, sino que la frase que dijo fue una exclamación hacía sí mismo y no hacía el árbitro.

Sabiendo que en el caso de insultos es la palabra de uno contra otro y que es muy difícil conseguir que le retiren la tarjeta roja, el club romano ha conseguido el menor mal, al ser solamente un encuentro el que le ha caído a Pirri, que no podrá jugar el domingo a las 17 horas en el Municipal Romano frente al Melilla.

A la baja del lateral zurdo para este importante encuentro se le podría sumar la de Carreño que en el entrenamiento notó un pinchazo y de momento es duda para el domingo.

Por otra parte, hoy tendrá lugar una nueva charla en el colegio Giner de los Ríos a partir de las 13 horas con la presencia del primer y segundo entrenador, algunos jugadores y el jefe de prensa.