Sáez debe tener muy claro, si se queda, con qué grupo de jugadores contará para la clasificación del Mundial-2006 y, sobre todo, quién debe liderarlos. Tiene que decidir si le concede una nueva oportunidad, sería la quinta, a Raúl, cuyo declive físico ha arrastrado a España y la ha dejado sin líder. El capitán cuenta por fracasos sus participaciones en los Mundiales de 1998 y del 2002, y en las Eurocopas del 2000 y del 2004. Raúl tendrá 28 años en Alemania. Una buena edad. Pero ese no es el problema. El técnico debe decidir si sienta a Raúl en el banquillo, si lo encaja con Valerón o si apuesta por el canario como mediapunta. España no puede ser, entre las aspirantes al título, la única selección en la que el mediapunta no decide. Alemania tiene a Ballack, Portugal, a Deco, y Francia, a Zidane. ¿Y España?

Sáez tendrá, además, otro problema con el nueve. Una posición en la que ya no podrá encajar a Raúl. Fernando Torres es, pese a su mal partido contra Portugal, el futuro. Tendrá 22 años en Alemania. Y tendrá dos temporadas más de experiencia en el Atlético de Madrid. España ya no podrá prescindir de él y de su indiscutible talento. Sería un lujo bastante grande. Pero hay que atreverse a sentar a Raúl, algo que ya es debate nacional.