Jaime Soto sigue los pasos de Nucho, Teo Tirado y Carlos Expósito y abandona la disciplina del Cacereño por iniciativa propia. Ayer, antes del entrenamiento, habló con el entrenador, Angel Marcos, y decidió marcharse ante la falta de minutos y las pocas expectativas de jugar, ya que los dos fichajes que ha realizado el conjunto verde en el mercado invernal, Martins Diop y Quique Carreño, son también delanteros como él. Hijo del cantante José Manuel Soto, el punta sevillano solo había participado en nueve de los 20 partidos disputados (uno entero, ante el Arroyo), acumulando apenas 315 minutos sobre el césped.