Ha llovido demasiado y han sucedido muchas cosas desde que el pasado 20 de agosto Villanovense y Extremadura abrieran el fuego de la competición y firmaran un empate a uno en el partido inaugural. Ya, desde aquel encuentro, se trazaron algunas sensaciones que poco después se fueron confirmando. La seriedad y conjunción del Villanovense, frente a la endeblez y timidez de un Extremadura. El tiempo puso a ambos en la tabla, uno tercero, peleando por playoff; y el otro en descenso, agarrándose a sus opciones de salvación. Después de 19 episodios, ambos vuelven a cruzarse cambiando de escenario en un derbi que catalogamos de las siete diferencias. Vamos con ellas.

La primera, en la clasificación. Los números no engañan. El Villanovense es tercero, con 35 puntos, 21 más que los pobres 14 que contempla el Extremadura.

La segunda, los goles. Mientras los serones se han eregido como los máximos realizadores del grupo con 34 dianas, el Extremadura es el menos goleador, con sólo 14.

La tercera diferencia, en el banquillo. Manolo Sanlúcar se ha afianzado como uno de los mejores entrenadores de la actual etapa serona. Su capacidad para crear buen ambiente y dar minutos a todos los efectivos le avalan. El Extremadura, en cambio, va por el tercer técnico. Eso sí, debuta bajo la chapa Juan Sabas, que se ha mostrado muy convencido de las opciones azulgranas para esta tarde.

La cuarta diferencia, en el mercado. El Villanovense aguarda paciente firmar un medio centro y un central. Su amplitud de plantilla le hace ser prudente. El Extremadura ha revolucionado su plantel. Doblas, Boateng y Walter serán hoy titulares. El club está pendiente del tránsfer del colombiano Julio César, mientras la semana que viene llegarán, al menos, tres jugadores más.

La quinta diferencia, en el once inicial. Sanlúcar contará con su equipo de gala, con la única duda de Tapia o Candelas en el lateral izquierdo. Sabas tendrá que decidir su alineación con apenas una semana de trabajo. La intensidad en los entrenamientos ha sido muy alta y la competitividad hace que la titularidad esté cara.

La sexta diferencia está en los capitanes. En el Villanovense lo lucirá el eterno Ángel Pajuelo, listo para suplir con garantías la baja de Elías Pérez. En el Extremadura hay cambios. Con las salidas de Saavedra y Pereira, Willy asume ese rol de capitán dentro del vestuario, mientras que Ismael y Carlos Rubén serían los más veteranos tras él.

Y la séptima diferencia queda pendiente para esta tarde. Habrá que buscarla en las sensaciones y en lo que pueda suponer el resultado para ambos. El Villanovense podría iniciar la consolidación a puestos de playoff, mientras que el Extremadura puede poner la rampa del despegue o un tapón más para dejar de respirar. El Romero Cuerda dictará sentencia esta misma tarde.